
Decorar un espacio con colores neutros es una manera efectiva de transmitir calidez y generar sensación de equilibrio, dos condiciones imprescindibles para crear un entorno acogedor. Crudos, grises, terracotas y los tonos más suaves de la gama cromática están muy presentes en el catálogo de GAN y son, además, los protagonistas de las principales tendencias de interiorismo contemporáneas.
Si a la paleta de neutros añadimos la textura de los materiales naturales y el carácter único de lo hecho a mano, su magnetismo se multiplica. Muchas de las colecciones de alfombras y espacios GAN tienen en la naturalidad y tonos neutros su principal seña de identidad y, lejos de ser monótonas, se convierten en el foco de atención.
Diseños como CHADDAR o LAN NATURAL invitan a la relajación y nos arropan con contrastes de texturas – un verdadero placer al tacto y a la pisada. Sus funciones son muchas: regulan la intensidad del resto de la decoración, aumentan la percepción de amplitud y suman luminosidad, sobre todo los diseños con base cromática clara. Además, son versátiles y combinables, y encajan fácilmente con todo tipo de estilos decorativos y necesidades.

Diseñada por Charlotte Lancelot, CHADDAR es una alfombra bordada a mano con hilo de lana disponible en cuatro colores naturales para los que no se han empleado tintes: white, grey, camel, charcoal. Lo tupido de su tejido y sus tonos tranquilos la hacen apetecible para cualquier espacio que requiera de textura, pues cada puntada da lugar a matices de color y forma.
LAN NATURAL, diseñada por Neri&Hu para GAN, nos muestra los mil matices que podemos encontrar en la amplia gama de tonos crudos, beige, gris y coral. Confeccionada con una base de tejido Glaoui utilizando lana sin teñir, el gran atractivo de estas piezas reside en su ecléctica decoración gráfica, que alterna minimalistas tramas de cuadros, bordadas a mano, con motivos lineales de diferentes texturas y volúmenes.

Los materiales crudos y naturales forman el lienzo inicial sobre el que se dibujan los trazos de RAW, un diseño de Borja García (Made Studio). Sobre una base de yute se coloca una capa de lana que aporta calidez y dinamismo, estableciendo un diálogo entre interior y exterior y vistiendo el espacio de transición.

Otro diseño de Made Studio para GAN, PURE, nos remite a la pureza de las fibras de lana virgen que componen tanto la urdimbre como la trama de la alfombra, elaborada en India por artesanos expertos en la técnica del hand loom. Ese aspecto genuino y sincero lo es, además, por el uso exclusivo de tonos naturales (dark, grey y dun), en los que se resalta de forma delicada el juego de grosores y texturas.

En GAN, los colores neutros son sinónimo de conexión con la naturaleza. Los kilims y taburetes de la colección ROOTS, de Inma Bermúdez, emplean materiales naturales como el yute y el algodón, en una colección que supone un regreso a lo esencial y ensalza la labor de los artesanos. La ligera variación de color entre ocre, beis y marrón de las piezas ROOTS está en sintonía con la madera de acacia que estructura las patas de los simpáticos taburetes.
La lana sin teñir es de nuevo la protagonista de una de las últimas alfombras GAN, elaborada siguiendo la técnica dhurrie exclusivamente con fibras de lana virgen. En NATURAL ARTY, creada por el equipo interno de la marca, el beige contrasta sutilmente sobre un fondo crudo y luminoso. Combina sus aires de óleo abstracto con un estilo discreto y minimalista, y es una pieza fácil de integrar en todo tipo de espacios, desde los más sosegados hasta los más dinámicos, donde puede aportar la necesaria nota de equilibrio.

En cualquiera de las versiones que podemos encontrar en el catálogo de GAN, las alfombras neutras tienen un claro impacto armonizador en el espacio. Confeccionadas a mano en materiales naturales y apostando por ricos matices de la paleta de tonos crema, grises y tierra, suelen ser un acierto seguro ya sea como base en la creación de un ambiente o como punto y final a un interiorismo diseñado para reconfortar cuerpo y alma.